El antes, y el después....

Y, como decíamos ayer:

Basado en todo esto, se puede entender una de mis obsesiones: el conseguir el máximo de visitas para el proyecto arquitecturaenimagen.
No me importa las clasificaciones de Google, mas propias para los negocios publicitarios, que de otra cosa.
Nosotros, en las condiciones actuales, nunca tendremos una buena clasificación ,ya que nuestras visitas se dividen entre 14 páginas, un banco de imágenes y un foro. Lo nuestro es pura difusión de contenidos y eso, no hay Dios que lo clasifique de cara a un anunciante. La razón de tanta división de fuerzas es evidente: tenemos que aprovechar lo que gratuitamente se nos ofrece, sin depender de nadie e intentando idear el sistema necesario para no tener limite de espacio. No es atractiva nuestra empresa, ni tiene diseño, ni esta teñida de la supuesta modernidad del "rojo y negro". Somos mas bien de la estética del "Yo no soy tonto". Pero es útil, eficiente (también autosuficiente) y con posibilidades de la máxima difusión.

Somos pobres, pero honrados... Y, lo mas importante, nos enloquece la fotografía y, sobre todo, la arquitectura...¡Cosa extraña, según parece!

Por esta razón, el tener ya picos de dos millones de visitas, es algo que me satisface tremendamente por la difusión que pueden tener nuestros clientes y amigos; aquellos que se trabajan arquitecturaenimagen o los que confían en nosotros y en nuestra manera de mirar la arquitectura.
Lo que algunos interpretan como egocentrismo, otros lo interpretamos y aplicamos como posibilidad absolutamente independiente de difusión...¡y eso tiene un tremendo valor!

No he podido resistir la tentación de querer hacer las cosas a mi manera, también en la edición de mi trabajo. Ahora puedo explicar lo que hago, como lo hago y de que manera lo hago, con la máxima libertad y sin tener que estar silenciado continuamente por gentes ajenas a la arquitectura y la fotografía pero que, desgraciadamente, forman parte del proceso editorial de la misma. Ahora, aquí, sea bueno o malo soy el único responsable del resultado final

Esa, es mi única pretensión en esta empeño llamado arquitecturaenimagen

Una imagen de la vivienda-estudio del arquitecto/architect Daniel Gómez-Valcarcel en Madrid.
Este reportaje saldra publicado en el próximo número de Tectónica

No puedo negar que uno tiene sus debilidades en la edición de arquitectura en papel: TECTÓNICA.
Esta será, posiblemente, de las únicas publicaciones que saldrá airosa de esta vorágine de crisis que se esta cebando especialmente con este medio. Desde sus comienzos (en tiempos de "vacas gordas" y no ahora, que en muchos casos será ya una postura tardía), han luchado por hacer las cosas bien y han llegado por ello a hacerse imprescindibles; difícilmente algún profesional que se precie puede prescindir de sus especializados números en su biblioteca. Desde mi modesta opinión, es un claro ejemplo a seguir por la inmensa mayoría de las ediciones en papel de arquitectura , especialmente en la actualidad.

Para mi, resulta especialmente placentero el poder trabajar para ellos desde un comienzo y ayudar, en todo lo que ha estado en mi mano, a poder darle mas valor a esta publicación, si esto fuera posible.
Es un auténtico lujo, poder trabajar con el extraordinario equipo, encabezado por sus directores José María Marzo y Carlos Quintans. El actual éxito, se lo han ganado a pulso a lo largo de los años, en los que la gran mayoría se dedicaron a explotar "las ubres de la vaca" hasta dejarlas, en la actualidad, casi completamente secas...Eso, es justo lo que ellos no han hecho. El después, hay que ganárselo antes...

Lo último en lo que estoy metido, parece una perogrullada: la relación entre distancia, ángulo real de las ópticas y campo abarcado. El planteamiento es sencillo: si el campo abarcado de una óptica depende del ángulo de visión de ésta, del formato y de la distancia al objeto que queremos abarcar, en determinadas circunstancias una óptica de mayor focal, a igualdad de formato, podrá atrapar mayor campo, con un menor ángulo... Resumiendo: una óptica de determinada focal, puede abarcar mas espacio, que otra de menor focal y por lo tanto mayor angulo de visión, desde el mismo punto de toma.

Esto que en apariencia parece imposible, es uno de las habilidades, con que algunos conseguimos ángulos de visión espectaculares, sin necesidad de fotomontajes, programas de software y similares falsas manipulaciones informáticas. Es una lectura distinta del típico caso: si no te entra completamente un objeto en el campo, aumenta la distancia entre la cámara y ese objeto...

A veces, los avances no se producen al descubrir cosas completamente nuevas por inexistencia anterior y si, por realizar una nueva lectura y aplicación a lo supuestamente ya conocido y controlado. Ese es el caso

Dos tomas desde el mismo lugar, realizadas con dos ópticas de distinto ángulo y focal: la superior es un Pentax 20mm y la inferior un Canon 17 mm. Pese a que la imagen del Pentax tiene un menor ángulo de visión, al picar y tras realizar la corrección de perspectiva, abarca en esa zona un mayor campo (superficie de edificio) que la que proporciona el objetivo de 17mm (no se ha realizado la corrección de distorsiones geométricas en el Pentax)

Aprovechando la nueva lentura de la relación entre focal, ángulo de visión y campo abarcado, se ha picado intencionadamente en esta imagen pues, tras la corrección por software, obtenemos así mas campo abarcado que si lo hicieramos, simplemente, desplazando la óptica shift (Canon 24 Shift)

Este sistema tiene unas posibilidades tremendas, que aun hoy sigo investigando, especialmente mezclado con ópticas Shift

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