Llueve en Cantabria

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Jose Ignacio Barrionuevo, Alberto Rubio. Arquitectos

En medio de este verano caluroso, en Cantabria sigue lloviendo... Y lo que para el turismo suele ser mortal, para nosotros es un auténtico paraíso... ¡Lastima no tener la casa en uno de los maravillosos valles cántabros interiores, lejos de este singular turismo playero y masivo que se da en Noja!

Y pese a que ya tenemos decidido cambiar de zona, la crisis económica (ahora finalmente se descubre que también está instalada fuertemente en el País Vasco) ha hecho desaparecer los compradores de segundas viviendas exactamente igual que en el resto de España y, por lo tanto, tendremos que esperar para poder trasladarnos...

Mientras tanto y en medio de esta tremenda crisis, seguimos trabajando en lo nuestro y a la manera que siempre lo hemos hecho: con mucho cariño y disfrutando lo máximo posible. También en estas tierras siguen existiendo posibilidades para poder desarrollar algunas de nuestras ideas.

Me resulta una sorpresa el uso muy intenso que estoy dedicando al Canon 17 TS-E; pese a que se trata de un gran angular excesivamente potente, las posibilidades que tiene de desplazamiento hacen minimizar los defectos que en principio posee. O me estoy convirtiendo en un auténtico hortera de la imagen arquitectónica o es que estoy aprendiendo a utilizar semejantes ópticas, antaño absolutamente prohibidas si se es un purista de la arquitectura. El ejemplo que hoy publico demuestra claramente lo que estoy descubriendo de mi actual forma de trabajar ¡sorprendente!...

Y es que no siempre es el raciocinio el que domina mi trabajo; en ocasiones como la presente, hay algo más que no consigo descifrar, pero que me hace descubrir otros caminos válidos  donde supuestamente están los erróneos. No sé, pero algo ha de haber en relación con los años que llevo en esto; necesito una critica solvente que me centre sobre  lo que estoy haciendo últimamente

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