El taller diario, de un viejo fotógrafo de arquitectura: Diario de un hortelano urbano (11)

jueves, 9 de febrero de 2017

Diario de un hortelano urbano (11)

10 de Febrero de 2017

4,45 a.m., 3ºC en el exterior, 23ºC en el interior y 13,9ºC en el huerto interior Estamos en un momento ya peligroso para el huerto interior: los 10ºC es el limite para que mis tomates vivan sanos y la próxima noche es posible que ya no ponga el Convair. Ya he localizado un termostato por 6 euros y espero poder adaptarlo al huerto e instalarlo en los próximos días. He tenido la suerte de localizar uno pensado para el baño (Roca), y por lo tanto mucho mas hermético de lo que pueden ser otros; no se puede jugar con la humedad y la electricidad. Con el instalado, ya no tendré que estar pendiente de la temperatura nocturna que resulta ser la mas importante para el huerto; las horas de frío son imprescindibles para infinidad de flores, especialmente para el tomate

La verdad es que nunca he instalado uno, pero no creo que sea demasiado complicado. Además siendo un termostato pensado para estar fijo, mi intención es hacerlo móvil pues no sé exactamente la zona del huerto donde he de ponerlo para que me funcione bien con el Aire Acondicionado y con la Calefacción Radiante; haré pruebas, con él en la mano.

Tras la instalación de este artilugio, ya me quedare mas tranquilo con las temperaturas, especialmente las nocturnas. Ademas seguro que ahorrare energía eléctrica también con la calefacción sin necesidad de estar siempre atento a las temperaturas del huerto, que lógicamente son distintas a las de la estancia que lo contienen; ese fué mi empeño desde un principio y que he conseguido…

Mucha gente cree que el hacer un huerto en una vivienda es una idea original, y eso no es así. Muchos arquitectos han diseñado las viviendas pensado en los huertos urbanos, como una solución alimenticia y de ocio para los próximos años. Aquí os dejo un ejemplo de Iñaki Abalos y Juan Herreros del año 2005, sobre la que publique una pequeña reseña en estas mismas páginas

Mis fresas ya están madurando y ahora solo queda esperar que su nivel de azúcar sea el idóneo. Pese a no haberme preocupado en exceso de ellas (salvo haberlas politizado con un pincel) ha parecido desde un principio que se encontraban bien, cosa que no ha sucedido con el fresón. Este último echa hojas nuevas desde el repelón (corona), que luego terminan secándose. No se si será falta de luz y por ello, una de las cestas con fresónes, la situaré en una zona con mucha mas luz a ver que pasa. Es que, al igual que la fresa no necesita sol ardiente (en un planta del bosque), seguramente el fresón si lo necesita (desde luego en Aranjuez la tienen a pleno sol de secano). Tendré que ir haciendo algunas pruebas e investigaciones por distintas zonas del huerto…

Y esa es la gracia de cultivar en las cestas colgadas de la celosía: además de aprovechar la luz sobrante por el lateral de la pared, te permite ir variando la posición del cultivo, y por lo tanto de la cantidad de luz que le llega…

He abonado con sal de calcio de asimilación rápida (efervescente), la jardinera que presentaba el tomate con lesión en su base. Es el único tomate que presenta esa lesión y, por lo tanto, tengo serias dudas de que las causas sean el calcio (ademas había abonado, creo que de forma suficiente, con sales de calcio), pero con todo y eso, lo he hecho de nuevo en pequeña cantidad, por eso de mi falta de suficiente experiencia…

No sé exactamente qué tipo de calcio es, pues mi proveedor me lo vendíó a granel, pero puedo decir que es efervescente y de disolución muy rápida

El abonado con calcio, lo realicé de tres formas: directamente en la tierra, disuelto en agua y pulverizado sobre el tomate y alrededores.

Si hay alguna manera de asimilación rápida por parte de la planta, creo que este es el sistema… Lo del pulverizado, la verdad es que se me ocurrió "a sentimiento" y no sé siquiera si se suele hacer así o es mas efectivo. En cualquier caso, el experimentar con "el negrito" es algo para lo que se ha dejado que crezca… Creo que hoy pulverizare de nuevo sobre una parte mas amplia de la planta par confirmar sus posibles efectos.

Ya he puesto un pequeño tutor al tomate Raf. Aunque pueda parecer absurdo en este huerto de interior mientras no tenga tomates en crecimiento (aquí no hay viento), se ha de hacer en los primeros estadios, para no tener que hacerlo con la celosía en ese momento; hay problemas a esa baja altura, con los fluorescentes pensados para dar luz a las partes bajas de las plantas. Mas adelante, cuando la planta ya presente treinta o cuarenta centímetros se amarrara a la celosía.

También he transplantado ya al bancal profundo, las diminutas plantitas de tomate PURPLE CALABASH. Yo creo que son plantas enfermas o procedentes de semillas caducadas por su minúsculo tamaño, aunque ya tengan alguna hoja definitiva. Parece mentira que esa planta pueda entregar tomates de tamaño normal, salvo que estos dos ejemplares tengan algún problema (lo cual no me extrañaría)

Mi hija, que nos visito ayer y se quedo a cenar, se quedo muy impresionada del huerto. Dice que ahora si que esta bonito. Pero no se da cuenta que solo hay un par de plantas adultas; cuando estén todas, creo que va a ser impresionante para un interior de un salón. Yo calculo que para primavera, ya todas las plantas estarán en producción y del suficiente tamaño como para que se vea la tremenda escala que va a tener finalmente el huerto. Esto, probablemente en otra ciudad que no sea tan seca como esta, podría traer problemas de humedad, pero eso en Madrid es una bendición… De hecho en verano tenemos auténticos problemas para mantener el 60% de humedad, pese a los dos Convair

De momento tenemos cinco tipos de tomates en los bancales profundos traseros (1 gallego, 2 de Mini bell, 1 Cherri negro, 1 Raf y, el último, 1 Calabach) y 6 plantas de pimientos (Padrón dulce e Italiano dulce) en las jardineras delanteras.

Con independencia de que ambas son plantas perennes en interior, se hizo así pues los pimientos taparán las calvas bajas de los tomates y así finalmente se vera una masa verde llena de pintas de colores rojos y pinceladas lisas verdes (los pimientos colgando de las matas)…

Ya que los Italianos están "sobradetes" de espacio (tres por jardinera) y que tengo plantones que me sobran, creo que pondré un par de ellos mas. Se que cuando sean adultas serán demasiadas plantas, pero he de coger experiencia en interior pues, igual funcionan bien con esa masificación; si no lo hacen así, se entresacan y listo. La gracia de este tipo de huertos, es que es todo tan rápido que los cambios no me causan ningún problema.

Por esa razón, el mantener un cultivo continuo de plantones, es algo fundamental. Finalmente hemos decidido que no adquiriremos uno de los semilleros de IKEA, sino que vamos a montar el tercer huerto (enfrentado a este) , de momento dedicado a plantas ornamentales y semilleros…; mas adelante, si acaso, se realizará el cambio completo a huerto alimenticio…