Hay obsesiones que me pueden y la del mar es una de ellas...
Continuamente descubro que ésta o aquella elección en algún color, o en algún objeto, va siempre, sin pretenderlo, en función de algún aspecto marino. El entarimado rojo de nuestra vivienda, mucho tiene que ver con la madera que se utilizaba en los barcos. El encuentro entre distintos materiales en la última obra de nuestra casa, siempre se solucionó, como históricamente se ha hecho en los barcos: con tapajuntas. Los tapajuntas de madera roja, nos gobiernan por todas partes...
Hemos recuperado una parte de nuestra colección de "huesos marinos" que hemos ido acumulando a lo largo de los años. Foto de Estella García |
La elección del dorado bronce o latón, mucho tiene que ver con la mar. En la imagen, la restauración de las bisagras antiguas de las puertas de mi casa |
Pese a que la casa es pequeña, de vez en cuando recuperamos alguna de mis colecciones marinas, aunque naturalmente no pueden ser completas, pero si una muestra de lo acumulado a través de los años. Con eso es suficiente para "oler" la mar, navegando en medio de esta estepa madrileña. Me siento reconfortado por ello.
Esa obsesión por los espacios mínimos de trabajo, creo que mucho tienen que ver con los lugares mínimos para la vida en un barco. Estoy continuamente navegando en medio de esta estepa madrileña... |
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