martes, 2 de marzo de 2010

SEGUIMOS con un tiempo horroroso y otros asuntos mayores

No hay forma de ponernos al día con el trabajo; salvo que lo que se pretenda sea realizarlo de cualquier manera. El tiempo no da un respiro; tenemos unas horrorosas nubes lisas, que provocan luces absolutamente planas. He de realizar varios viajes...y no sé por donde empezar, ni que hacer...Creo que es el peor año, en cuanto a malas condiciones climatológicas de toda mi vida, aunque recuerdo alguno hace diez u once años similar a éste. Si no termina la crisis con nosotros, terminará el mal tiempo o las malas imágenes consecuencia de este.



Ahora, estoy metido de lleno en el procesado de las imágenes realizadas del Hospital Tres Mares de Reinosa. Con sinceridad, creo que me encuentro ante una de las mejores obras hospitalarias que he conocido hasta el momento. Podría afirmarlo entre los más de cuarenta o cincuenta hospitales con los que cuento en mi archivo...




Auditorio en El Escorial. Ruben Picado y Maria José de Blas. Arquitectos/ Architects. (Cliquear sobre la imagen, para verla al completo)


Suele ser costumbre habitual que, en este tipo de grandes obras hospitalarias, prime más el "funcionalismo" que la integración con el medio. En este, y de forma muy clara, se ha tenido un exquisito respeto al medio que le acoge y, además, se ha optado por soluciones francamente interesantes en cuanto a distribución y funcionamiento.


Me ha resultado de un interés especial el sistema de control de enfermería absolutamente centralizado en el centro del edificio; las habitaciones se distribuyen a su alrededor, siempre accesibles desde el mismo centro sin necesidad de grandes recorridos....El acceso a las habitaciones por parte de las visitas, se realiza por el lado contrario por pasillos acristalados exteriores ; las circulaciones nunca se interfieren.

Reflejar esta característica en las imágenes, resulta ciertamente complejo optando finalmente, ya lo mencione el otro día, por la solución estética que aplique al reportaje del Auditorio de San Lorenzo del Escorial de Rubén Picado y Maria José de Blas. En ella, la intersección de direcciones (por líneas de fuga en la imagen) refleja, de alguna manera, la intencionalidad proyectual de sus autores.


También me llamó la atención el cuidadísimo estudio de la iluminación interior natural: luz difusa para las habitaciones y centro de enfermería, mientras que los pasillos de visitantes, luz natural directa


En mis tiempos de estudiante de la ETSAM descubrí como Alvar Aalto utilizaba los espacios residuales para elementos de comunicación y estáticos (escaleras, descansillos etc). También estos autores, lo utilizan aquí de igual manera: las esquinas entre habitaciones, se amplían formando salas de descanso para visitas, siempre con iluminación natural directa y vistas al exterior. También de ellos, parten algunas comunicaciones horizontales...


¿Y que decir de la iluminación natural del garaje? Se ha solucionado hábilmente desplazando el plano del forjado ligeramente; justo el que corresponde con unos patios de luz y con ello logrando un intersticio, por donde se permite que resbale.
En mi opinión, resulta una obra fantástica; ¡exquisita diría mejor!...Me estoy divirtiendo un montón en el procesado y construcción de la serie fotográfica



continuará a lo largo del día






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