Ayer, tras visitar una exposición, me decidí a llegar hasta casa caminando pese a la tremenda contaminación que ahora tenemos por polvo africano, además de los contaminantes habituales de la ciudad. Naturalmente todo ello realizado con mascarilla.
En casa, esta el filtro de aire trabajando las 24 horas del día en su potencia mínima; hoy ampliare a una potencia media para compensar la cantidad de horas que la ciudad lleva totalmente embarrada en polvo del desierto. Hay que evitar por todos los medios respirar esa mezcla de virus y bacterias nuevas, mezcladas con substancias en suspensión y diversos productos cancerígenos tradicionales de la ciudad. Es una auténtica bomba para la salud, especialmente para los que ya tenemos unos años y ciertos problemas de alergias respiratorias.
Ademas de lo mencionado, parece ser que ese polvo esconde ciertas partículas metálicas, sospechosas de haber sido añadidas por fumigación de nuestros cielos, al polvo del desierto; en Francia también se han encontrado...
De momento no tengo problemas, aunque ya noto que mis vías respiratorias van a peor y que compensare con un expectorante fuerte, antes de que la cosa empeore. La prevención, en estos casos, es lo ideal...
Tenemos una sensación de espera a lo que viene, que no es nada agradable y nos mantiene continuamente en un cierto estado de nerviosismo. Ahora también con el desabastecimiento de los supermercados de alimentación por falta de transporte, aumenta esa sensación. Notamos que se acerca la miseria de forma tramendamente rápida.
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| Recolección de lechugas y grelitos tiernos |
Afortunadamente nos hemos ido preparando durante algunos años y espero que para nosotros el golpe no sea excesivamente duro. Pero me temo que ya, para muchos de mis amigos, empieza a ser preocupante y, para algunos, incluso, angustioso. Lo que aparentaba para ellos una exageración nuestra, empiezan a comprobar que era 100% real; ahora ellos mismos empiezan a acumular comida básica y artículos de primera necesidad; ya no somos tan frikis como decían... Y ahora, para los que se han quedado sin trabajo, o tienen poco, el comprar todo lo que necesitan supone un grave problema... Hace tiempo que les avisamos de que tenían que plegar velas, ante el fuerte temporal que se acercaba...
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| El huerto en verano |
La huelga de transportes, nos ha pillado con alguna cosa por el camino pero, afortunadamente, nada de gran importancia: filtros, transformadores y repuestos de lámparas para el microscopio. Acerté en adelantar desde hace un par de años todo el resto de elementos, maquinas y repuestos que podría necesitar para ser autosuficientes, dentro de lo posible, para lo que se nos venía encima.
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| Huerto familiar en Galicia |
Ya esta aquí y, aunque preparados, tenemos una extraña sensación que no terminamos de identificar. Probablemente sea que no estamos suficientemente preparados mentalmente, para vivir mucho mas aislados; los amigos ya lo están, muchos aterrorizados por la enfermedad de moda o otros por padecer alguna otra enfermedad consecuencia de esa inyección, supuestamente voluntaria.
Y en estas condiciones, el huerto, y las plantas, son nuestras actividad principal; en lo único con lo que estamos "acompañados" y normalmente nos produce satisfacciones. El huerto, por muy minúsculo que sea, es un gran compañero en estos días, y totalmente imprescindible para aislarnos de lo que nos rodea, por el bien de nuestra salud mental.
- Autosuficiencia urbana (1) Fabricación de pan en casa (1)
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