El taller diario, de un viejo fotógrafo de arquitectura: Autosuficiencia urbana (180). La pesca ( 16). Cuerpo de tiburón y espíritu de ballenero

martes, 21 de julio de 2020

Autosuficiencia urbana (180). La pesca ( 16). Cuerpo de tiburón y espíritu de ballenero

- Autosuficiencia urbana (75). La pesca

- Autosuficiencia urbana (76). La pesca(2). Sin gastos fijos

- Autosuficiencia urbana (78). La pesca (3). El equipo

- Autosuficiencia urbana (79). La pesca (4). El otro equipo

- Autosuficiencia urbana (80). La pesca (5). Las pruebas

- Autosuficiencia urbana (81). La pesca (6). El reingreso y la vela

- Autosuficiencia urbana (82). La pesca (7). El transporte para la pesca

- Autosuficiencia urbana (83). La pesca (8). La seguridad en la pesca
- Autosuficiencia urbana (84). La pesca (9). Las cuestiones legales
- Autosuficiencia urbana (85). La pesca (10). Las últimas cosas
- Autosuficiencia urbana (86). La pesca (11). Algunas mejoras
- Autosuficiencia urbana (168). La pesca (12). Pequeñas reparaciones

- Autosuficiencia urbana (174). La pesca (13). La acampada

- Autosuficiencia urbana (175). La pesca (14). El nuevo asiento del kayak

- Autosuficiencia urbana (177). La pesca (15). La seguridad en la silla

- Autosuficiencia urbana (180). La pesca (16). Cuerpo de tiburón y alma de ballenero

- Autosuficiencia urbana (182). La pesca (17). El timón

- Autosuficiencia urbana (183). La pesca (18). Resumen Kayak

- Autosuficiencia urbana (195). La pesca (19). Nuevo kayak, más "ligero"

- Autosuficiencia urbana (196). La pesca (20). Veinte mil leguas..., aligerar el kayak y otros asuntos
- Autosuficiencia urbana (198). La pesca (21). Capacidad de carga, ordenada
- Autosuficiencia urbana (201). La pesca (22). Aligerar el peso del kayak (2)

- Autosuficiencia urbana (309). La pesca (23). Transportar el kayak

Hace tiempo que tenía prevista instalar un superficie antideslizante en la zona en la que me puedo poner de pie a lo largo de la pesca, pero no encontraba la forma de hacerlo con seguridad en una superficie alabeada. Finalmente me he decidido a hacerlo por partes (tiras de 2 cm) evitando el problema del alabeado y sus posibilidades de despegue en poco tiempo, además de la necesidad de tener que adaptar esa superficie de goma a la del kayak, a base de cortes, plegados y similares.

Estéticamente, esta superficie anti deslizante mucho tiene que ver con las agallas de un tiburón

Mis dos gatas, están encantadas de tener un astillero provisional en el salón

Desde el día que lo estrené en el río Alberche (en la práctica, una mañana haciendo solo pruebas de seguridad), muchos han sido los resbalones que me he metido con ese material plástico que, aunque le han dado una cierta textura rugosa, con y sin el agua es casi imposible que no resbale; eso en el mar o el pantano, es muy peligroso

También la estética de esta imagen, me recuerda un tanto a las barcas balleneras

Con la superficie de goma añadida, ha desaparecido todo peligro y el poder ponerse de pie en el kayak para un lanzamiento, o simplemente para estirar las piernas, es posible sin peligro (a mi edad, siempre con los estabilizadores puestos).

He decidido cambiar todos los cabos del kayak, para ordenarlos algo más en base a colores según su función: amarillo fino para el timón, amarillo grueso para el izado de la vela y rojo para todo aquello que tiene que ver con el mástil. Aunque pueda parecer nimio, el montar y desmontar todo, se complica sobremanera, si no hay un código muy claro de colores. En ocasiones también el manejar la vela navegando, te hace dudar por un color de un cabo que no este bien puesto.

Dirección de navegación según la dirección del viento

Y es que el bajado de una vela ante un peligro, ha de ser instantáneo y sin dudas; es como el freno de un coche. Ya que una vela circular con estructura metálica, no se puede dejar suelta, lo mas rápido es bajarla de su posición y depositarla horizontal en cubierta...